Esta mañana mientras caminaba hacia la alameda, casi sin llegar al alba…
Empiezan a colorearse las calles, el suelo, el cielo, los árboles…
El despertar de los pájaros y alguna que otra persona que madruga, nos dice que la hora ya es venida, y todo se pone en marcha…
El sol baja y hace a las calles visita.
Un ave que se eleva,
El alba que nos llega,
La almohada aún caliente que guarda las caricias,
Las esquinas solitarias que vibran en las calles que aún dormitan con el redoble de tacones de zapatos que caminan, _ los míos por ejemplo_
Las fugas de jazmines van aromando el aire, y ya la calle se agita, comienzan a abrir las puertas y las cosas toman vida.
¡qué bonita Andalucía cuando su eterna luz nos habita¡
Que hasta las diez de la noche reina aún la luz del día, alegrando corazones y su cielo que multiplica colores.
Esta mañana las sábanas me han quemado todos los miembros del cuerpo, y al primer rayo de luz, me he levantado corriendo.
Este clima andaluz en el que nada está quieto, nos hace volar el tiempo, el aire se despereza y el sol asoma en el cielo, ahuyentando las penumbras y dando color al viento.
Esta mañana he ensanchado mi corazón y mi pecho.
¡Andalucía mucho te quiero¡
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Hermoso canto de amor a la tierra!Te felicito por sentir tanto los pequeños momentos de cualquier mañana.
ResponderEliminarGracias de nuevo, si a la tierra entera se la ama, con motivos suficientes si es la tuya propia donde naciste, y a las demás porq es nuestra tierra en general, nuestro cobijo compartido, a la que tenemos el deber y el derecho de amar, cuidar y proteger como ella nos da todo lo que conlleva y es mucho, que dicho sea de paso, nos la estamos cargando.
ResponderEliminarUn abrazo Rosa.