Hoy en el hospital, se me agravó tu recuerdo, se me escapó el llanto entre las pestañas, velándome la mirada, luego de secármelas, apareció la espera intercedida de silencios.
Tuve tiempo para navegar sin rumbo por mis pensamientos, sin embargo tu presencia reventaba las nubes en la ventana, ha hecho un sol de escándalo, en cambio, ha llovido tristeza desde las córneas de mi océano y ese silencio se ha llenado de voces calladas y de sonrisas sin gestos.
Tempestades amenazaron mis ojos de verde húmedo.
Y las manos, vacías, siembran caricias sin tacto, y parecía que todos los caminos se rompían bajo un vendaval de ausencia, y no sirven los ojos para mirarte el rostro, se balancea la voz en medio de la impotencia y de la rabia.
Hoy te eché tanto de menos…
Pero ya aprendí que la boca también sirve para pronunciar palabras calladas y que el corazón es un mago y sabe hacer pentagramas de abrazos y que se hace valiente resguardando el cariño para mostrarnos siempre el lado oculto de la esperanza, esa que destila y expulsa la rabia después de guardar el luto y el fracaso…
Hoy a pesar del llanto, el silencio y tu falta, te sentí a mi lado y me llenaste de amparo…
Encontronazos de sentimientos, una ausencia que duele, impotencia, rabia... y esa sensación final de amparo, que muchas veces nos cuesta encontrar.
ResponderEliminarBello escrito, duro, pero bello.
Besos.
Estando..estoy
ResponderEliminardando..recibo
queriendo..me quieres
tu cariño..mi maxima
no necesitas llamar
te intuyo..y me acerco
pero no confundadamos
te quiero tanto
como una hija
una amiga
una hemana..una gran amiga del alma.Te quiero
Ausencias... Ausencias... Ausencias...
ResponderEliminarLos seres humanos somos como trocitos de papel de un mensaje secreto que necesitamos unirnos para cumplir su encargo. Y el mensaje somos nosotros mismos y lo que sentimos.
La llamada del alma a la comunión y al hermanamiento o la llamada del corazón a la seducción y el enamoramiento es irresistible -hasta arrolladora-.
Ausencias… Ausencias… Ausencias… Por suerte, como bien dejas escrito, la ausencia nunca es total. Yo diría que, a veces, la ausencia es compañía.
¿Necesitaré hablarte de la belleza de lo que escribes (estilo y mensaje)? No ¿verdad?
Por cierto ¿qué haces en un hospital…?
Un gran abrazo para ti.
quizas la belleza resida en esas palabras , que ahogan en el alma, que cuando surgen lalen como suspiros, un besito preciosa
ResponderEliminarSí, como bien dice hargos, allí esta la respuesta amiga, en la belleza de tus letras y sentir.
ResponderEliminarBesos
Eleva tu Alma,
ResponderEliminarBesos enormes...
Increible. Tu nivel esta mejorando notablemente. Bien por ti.
ResponderEliminarJorsh