Sueño y Vuelo, aunque me caiga luego...

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Corramos... Hay que salvar el planeta.

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La Tierra

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sábado, 27 de septiembre de 2008

No era una Luz_ Sólo un candil.


Te colaste un día por mi ventana
como un viento afilado,
dejándome el corazón
como un junco… quebrado.

Mi última caricia te arrastró resignada
saliendo de tu piel,
empujándote a otra orilla,
te bebiste todo el agua
de un océano lleno
y mi corazón se silencia
como un diapasón roto…


Ahora estás tú en el exilio,
cuando sientes mi mano en tu hombro
y la soledad te aplasta con su sombra
y desesperadamente y de forma inútil,
te echas a nadar en cualquier mar.

Se te derrama la vida al recordarme
y te ahogas en la tristeza irregular
de los charcos,
ese sucedáneo de mar
que nos separa la piel
de la caricia urgente
y aprende a ser escarcha,

Dentro, un fuego que se extingue
que se reduce a cenizas,
y abierta… la espera,
de inundar la vida de vida,
de desnudar la lluvia con los dedos,
de transplantar los geranios de mi patio,

En la bóveda estrellada
se asoman arpegios de luna,
mañana el arco iris
llorará colores en mi espalda…
seguro,
a no ser que la luna se pare en una esquina
y el violeta de la noche
quede enredado entre mis manos,
dejándome en las sombras…

Pero si es así,
por favor
no me socorras…
lo prefiero así,
antes que la luz mortecina y efímera
de un falso candil.

Ansiosa


Ansiosa por el jugo de tu boca
licor de beso que a mis labios niegas,
intento colarme en tus espacios
guiándome por sueños que me llevan,
pensamientos que me enredan
en la llamada de una piel que me doblega.
Mi piel encendida por la espera
suda tu ausencia con gotas de esperanza
Verdes, como un suspiro en la hierba,
como el viento en la arboleda
verde oliva de aceituna, como la pena en la era,
verde aliento de esperanza
que me respira el alma
anhelo de tus manos de espuma
que me dejan a piel desnuda ...
y es tu boca entreabierta más
fruta...

mis ojos ya no ven…
perdida entre tus lunas.

Llena de Sueños




El océano me habla de tu presencia
la soledad de las olas me trae tu beso
lleno de sol y sal,
al que yo beso
llena de espumas, llena de sueños,
fueron o fui?
existir es estar,
es vivir,
y aunque no estés,
yo te vivo,
no importa si no es oída tu voz
las olas fieles cantan…
el pensamiento perdura
más que la envoltura
así el corazón entre mis manos late
y su latido dura
el canto invita,
el viento pasa
sobre mis brazos cortos
que no te alcanzan,
callado el corazón, mudos los ojos
tu recuerdo me impregna, se deshace
y se queda eterno rondador por el aire.
El tiempo va cayendo y con él los sueños
y mi voz se esparce allí en tu cielo.