Sueño y Vuelo, aunque me caiga luego...

Sueño y Vuelo, aunque me caiga luego...

Corramos... Hay que salvar el planeta.

Corramos... Hay que salvar el planeta.

La Tierra

La Tierra
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lunes, 31 de marzo de 2008

Si no hubo motivo.

Porqué paraste la danza de corazones

De sus ojos…

Y volviste negra la yerbaverde de su rostro,

Cerraste los atardeceres de los bermejales,

En donde hundía sus sueños,

Quizá hubo malos momentos, pero

Nunca tan perdidos…

Fueron sus manos escarcha de oro

Agua de la tierra y otras lágrimas

De los ojos y los labios que abrazaban,

Y todo el verde tuvo una pregunta

Bajo la música del habla,

Una pregunta el silencio

Bajo la escucha y la palabra,

¿Porqué apagaste la luz

del lucero que portaba?

Y lo enterraste a galope

como una gota en el agua,

Qué fue? Si nada pasaba.

¿Porqué marcharon los pájaros?

Se desnudan las acacias,

Se arremolinan los vientos

Y tirita la sombra entre las ramas…

Se detuvo el mar

Llovió barro

Y el arcoiris destierra el verde

Esperanza, cada mañana.

domingo, 30 de marzo de 2008

¡ Qué Tonto eres!

¡Qué tonto eres¡
Nunca me dio tanta pena de ti como ahora.
Has querido atrapar el huracán entre tus manos,
Llenas de soberbia.
La primera frase lo dice:
Estás inválido de razón
Y tu cerebro, sobre esa silla de rueda es nada;
Y ve pasar la vida impotente y absurdo;
Desmembrado como una granada abierta,
Ensimismado con verdes limones y amargos sistemas
De inmateriales estructuras y opacos enlaces.
¿Cómo quieres dominar la parte más pura de lo sensible,
Esa invención indudable y exacta del hombre puro de razón?
¡Si tienes atrofiadas todas las conexiones
Entre los espacios y los tiempos evidentes ¡
Si te quedas turbio muchas veces
Entre esas deducciones frágiles que pretendes
Y de pronto,
Los espacios tiempos
Se te desvanecen como devorados por una estática inexistencia.
No sé que intentas…
¿Hundir tu sinrazón en lo que para ti es inusual?
¿luchar?... ¿tú?
¡ Si eres microscópico mosquito
Que desea alimentarse de la sangre enésima
De una mastodóntica diosa… y no tienes trompa ¡
¡qué tonto eres… ¡qué tonto eres¡

Pequeñas Grandes Cosas.


Esta mañana vino y la sentir llegar de forma peculiar, no suelen ser mis mañanas con tanto alboroto, cerrados aún mis párpados, igual que la aurora llega en un gran carro de claridad y aplastasen mis ojos, así abrió mi hermana la puerta y la persiana de mi cuarto, sentí un crujir de luces y una voz cansina,” arriba vamos que te invito a desayunar, vamos al puesto de los churros que íbamos con papá”.

Las puertas del balcón se abrieron de par en par y una corriente de aire y de luz me obligó a abrir y cerrar las puertas de mis ojos.

Me levanté de un salto y en poco tiempo estábamos sentadas delante de dos tazas humeantes.

Carla me miraba, me cogió las manos y abrió mis dedos para ver las enramadas rayas de las palmas…

¡Qué delgadas tus manos¡ y siguió sin tomar aire hablando sin descanso…

Alba quiero que sea todo como antes- estaba seria- detrás de su pelo se veía el mar y el sol me daba a mí de lleno en la mirada frente a ella.

- El otro día fui a buscarte, te encontré cuando salías del trabajo a la universidad, te seguí en esos actos tuyos tan extraños y únicos y no te dije nada, es que Alba, hay algunas cosas que no sé si me gustan de ti, te apartas de la familia y te haces cada vez más solitaria, vine dispuesta hoy a decirte algunas cosas y a pedirte que vuelvas a ser la chispa que encendía nuestras vidas, si papá estuviera aquí, no tendría que decirte todo esto.

Yo me quedé triste y Carla agarró aún más su tristeza.

- Entender parece algo dificil a veces, pero tú últimamente también me lo pareces, te decía que te seguí con la intención de alcanzarte pero me llamaste tanto la atención que no quise romper ese instante, ibas con los ojos brillantes, andabas suave, abstraída, sin fijarte en nada ni en nadie, por eso no me viste, yo no sabía si reír o espantar las lágrimas, Alba, llovía a mares y caminabas bajo la lluvia torrencial, seguro tú ni te acuerdas, la mayoría de la gente iba refugiada en sus paraguas o se paraba en los portales, en cambio tú desafiabas esa lluvia torrencial, con el mismo paso de siempre, sin paraguas, a cabeza descubierta, te miré, el agua y el viento alborotaban tus cabellos y luego se te pegaba a las mejillas, el agua te caía a chorros y una inmensa ternura me sacudió mientras te miraba, el caso fue magnífico, me conmovías y me hacías sonreír, pero dentro me dolía…

- Luego claro enfermaste, cogiste un catarro que te tuvo con fiebres dos días.

Si, me acuerdo.

- Alba solo quiero que me digas que te pasa, solo quiero que vuelvas a ser la que eras.

Carla no digas eso, yo soy la misma, ya me conoces, solo que ahora busco más la soledad, y soy así, me gusta la gente que ve con ojos distintos a los demás y todo lo que hacen, siempre he considerado las cosas de distinta forma, quizás porque he vivido siempre al lado de gente muy especial, que nunca estaban satisfechos y vivían en un cambio continuo o solo eran ellos tal cual, que sabían dentro lo que estaba bien o estaba mal, y estoy agradecida por eso, ya sabes que el abuelo ha sido la pasión de toda mi infancia, noté desde pequeña que él era distinto a los demás, yo lo observaba, lo adoraba y aprendí a acostumbrarme al hecho de hacer las cosas distintas, no me enseñó nada distinto a lo que él hacía, y no lo puedo remediar, toda mi vida he seguido después huyendo de lo simple y de las normas, me gusta la gente con esa pizca de locura que no les hace caer en la rutina, aunque a veces caigan de una nube como yo… aunque nunca sean felices, no te preocupes por mi, estoy bien, no alertes a mamá, aunque no se alertará, desde pequeña siempre vi, que ella ya me vio a mi…

- Pero Alba contigo nunca se sabe lo que va a pasar y es uno de tus atractivos, pero nunca pides ayuda.

No te preocupes intentaré acercarme más y no me importa que vengas, hazlo cuando quieras, eres extraordinaria y sabes cuanto te quiero, pero déjame ser yo misma, yo no pido nada más.

Bajamos ya la calle, ambas con una sonrisa para si, el aire tibio de la mañana levantaba los cabellos de carla y observé con alegría que estaba más tranquila y cuanto me quería…

¡ Yo también te quiero carla¡

sábado, 29 de marzo de 2008

Paisaje.

Me acerco a ti:

¡Qué frías tienes las manos!

Sentados uno frente al otro,

Aparté las mías de inmediato,

Sentí mucho frío,

Como el mismo vacío ocupándolo todo.

Quise gritar para romper el silencio

Pero me quedé pegada al paisaje

Que se ve si se nos mira

Desde fuera,

Ese paisaje que se hunde

Milímetro a milímetro

Como una Venecia triste

Meciendo el agua a pinceladas,

Parece que quiera dibujarnos la vida

Pero no le sale…

Al mismo tiempo que nuestras ilusiones

Hacen agua en nuestro viaje

A ninguna parte.

No me gustan las manos frías…

Me reconoces en la mirada de tu asombro

Y tú me dices: te delata el silencio

Sé que no me quieres,

Soy el destierro de tu pasado,

Tu soledad antigua,

La luz que ciega tu mirada,

La subasta del fracaso,

Me veo en las caricias que te faltan,

Y me está doliendo ser,

Seguramente nada.

Sé que es incuestionable,

Pero sabes que por ti…

Ofrecería hasta mi último aliento,

Impronunciable.

Haiku.

Al borde de la cama

Saco la pluma

Versos dolientes y dormidos.

Haiku.

Las mariposas y el viento

Desprenden música

En las ramas del abeto.

Haiku.

Cuando amanece

la luz de la realidad

rasga mis sueños

viernes, 28 de marzo de 2008

Si Prefieres...

Te has quedado justo en la arista de mis labios

sintiendo mi aliento_ tan tibio_

por si acaso te incita, te cierra los ojos

y de repente te callas, me masticas y me tragas,

entonces, despeina tu mal humor

y te vuelve gatuna la mirada, tan dulce,

tan llena _ tan triste_

Quizá la necesitabas como zumo de luna

que chorrea en mi ventana,

o esa música que me regalan

los gorriones de mi terraza_ tan bueno_

_tan simple_ que te vistan de calma

cuando te das por vencido _ tan flojo_

Quisiera saber si prefieres mi silencio _ tan solo _

volverme sustancia arriba, existencia,

raíz, ahora, volverme rama…

poema, quizá enamorado…

donde nacen los sueños provocados,

los vives, los abres, los quiebras

sobre ese árbol, después cansado…

reclinado sobre aquél verde, o éste

el este que te levanta,

por el oeste el océano de mis atardeceres,

por el norte, yo…

por el sur, de donde vengo ¿o es a donde voy?

O si prefieres volverme aire,

cuando soy viento y respirarme

y ser tu oxígeno y tu aliento…

estaré loca, no sé tú pero yo…

¡he preferido ser viento!

Y no regalarte lo tibio de mi aliento.

jueves, 27 de marzo de 2008

Sobrevivo.

Soy de aire y agua como la tierra,

He muerto seiscientastreintaidos veces,

A las puertas de una madrugada,

Sobrevivo en cada nuevo latido

Que zarandea mi ternura,

Subsisto en vuestro aliento

Y casi sin darme cuenta,

Me tiráis de los brazos,

Me besáis en la nada,

Me amáis y me sacáis de quicio.

Soy de fuego y piedra como la tierra,

A veces me entierro en mi memoria

A una profundidad de seis metros

Y trago tierra amasada con lágrimas y saliva.

Soy de hambre y humo como la tierra,

Con raíces profundas que nadie descubriera,

Pero allá en lo más hondo… me siento tan tierna,

Que maldigo con aguaceros de ojos derramados,

Demostrarle al mundo irremediablemente,

Mi sentir en tirones de Rock versado

Frágiles y desgarrados.

Y mientras,

tu y yo jalamos de la cuerda

bailando entre las fuerzas

impulsados por el Rock and Roll

que mueve el corazón.

miércoles, 26 de marzo de 2008

Si Te Parece

Escupe tus verdades,

No dejes que tu boca se agüe

Y te ahogues,

Solo los buenos amigos dan entera su saliva,

Aunque su boca se quede seca y aterida,

Suéltate, deságuate,

Que yo mientras con esta claridad

Y mi paciencia, nunca escupo

Si no se lo merecen…

Tú sí.

Así que, vamos a escupirnos mutuamente

Con la boca bien abierta, sin trampa ni cartón…

Si te parece…

Nada, nada que no se fuera y que no quedara...

Hoy he vuelto a soñarte y he vuelto a morir, en tus manos irreales…

Sabiendo que tu palabra, tus besos y tus ojos siguen siendo sueño, vacío rutinario al llegar los instantes del tiempo que transcurre.

He vuelto a volar…

A cielos de imposibles y me he vuelto a caer, al fundirse mis alas de cera al calor de tus manos y he caído en picado de mi vuelo diario… no sé ni como me queda el cuerpo después de tantas caídas y jirones de piel desorbitados; de esa guerra absurda de la que no tengo noción cierta si es por buscar un mundo abierto, un mar sin límites, un espacio infinito o un frente sin alambradas.

Desde la orilla inmóvil intercambio miradas de sales en mi océano, la mar grande, imprecisa, mar intocable…

Se me antojan solas las olas sin tus brazos_ mi regazo_

No busco aristas ya perdidas en los píes de algas y de espinos, que nunca hubo beso, ni hielo _ pero ambos nos unieron_ nada, nada, que no se fuera y que no quedara.

Nos nació ayer una oleada de fuego y llama, nos inundó la boca del dolor del desperdicio.

Quieta, delante de este mar inmenso descubro un poema y también un sueño_ roto_ en el camino, cada tarde es un buzón para el destino, ese tránsito común que nos obliga, ese tanto querer sin memoria, ese injusto tiempo sin reverso que no quiso regalarnos de frente un solo momento, ese instante de sangre y vida que no se cuenta en este papel ni se puede morir en esta orilla…

martes, 25 de marzo de 2008

La luz de Tus ojoS.

Me dirijo al enigma de tus ojos

chorros de luz que me atraviesan

mirada, corazón, cobijo…

infinito que se abre

sobre el recipiente de mi piel

con caricias inmortales,

a cada paso tus ojos me desnudan

bajo el cielo amplio de tu sonrisa

y entre tus manos,

la brisa…

la noche y esa luz que me divisa,

fuego sobre la tierra

sudor bajo el agua

sed en la hierba…

me miras, me hablas y me abrazas,

y si me besas,

tus besos son labios recién nacidos

aquí, allí y en cada forma

que el río toma.

Porque me vencen tus ojos,

hágase cuerpo esa luz que me avasalla.

¡se me derramó la vida al recordarte¡

Y me ahogaste

En esa tromba de luz

Irreemplazable,

Anda vete…

no sea que tanto destello

de luz incontrolable,

nos lance al espacio exterior

del universo y después...
a ninguna parte.

lunes, 24 de marzo de 2008

Limpieza.

Es necesario vaciar los bolsillos (de mi memoria)

Abrir las puertas, las ventanas (las del tránsito y mis dudas)

Limpié la chimenea de fuegos fatuos,

Vacié armarios, no necesito mortajas,

Abrí baúles, para tirar ajuares desusados

Puse boca abajo todos los cajones, las alacenas,

Para sacar todo lo inservible…

Y al final de todo, salió mi yo… libre,

Abrí cajas negras y también blancas,

Liberé relojes de cualquier tiempo

Desalambré fronteras,

Limpié el entorno donde habito,

Y una vez limpio, vacío todo,

Sin maletas, sin refugios

Y sin espinas en la conciencia,

Ahora sabré de verdad,

Quien me quiere, quien me despierta.

lunes, 17 de marzo de 2008

Un Instante.


Llegó el momento

no hubo espera

y te quedaste perdido

en el reflejo de unos ojos,

me busqué en ti

y no supe encontrarme

me deshice en dejadez

y no pude emerger…

Rocé tus labios con los míos

Y temblé…

Guardé tu corazón

en el bolsillo de mi cuerpo

y me marché…

Pero eso si, al menos

rompí la cordura del instante

y te extrañé…

y ahora no sé,

si te necesitaré…

No soy la misma mujer

esta que sueña…

por lo que el viento sopla

y las olas suenan,

la que huye del amor

y se esconde

entre los adoquines de su sombra,

ciega, sorda y muda

ante la marea de tu espera,

se acabaron los logros,

también los lloros

entre las manos

de ningún ídolo…

MoriR Y RenunciaR.


Déjame cantarte mis versos, mientras tú los despliegas en silencio.

No fui capaz de decirte que quise juntarnos al filo de un abrazo _ me quedé quieta _ leyendo los mensajes de tu mirada y allí en lo alto seguías contando estrellas y cultivando primaveras en la distancia.

Y eres tú el que juega a entregarse y era yo la que esperaba, poco a poco te ibas acercando entre el ruido del silencio, para caer ya desvalido a mis brazos, no sé como pude sentirte en mis venas.

No puedo dejar de imaginar tus manos acariciando mi vida, ni tus ojos mirándome, porque mi alma te llama a voces, mi cuerpo a gritos y mi voz en silencio, agotando mis suspiros, y ahora ya, no sé si quiero los tuyos, mi voz ya solo busca el viento para rozar tu oído.

¡Ay amor¡ que amargo eres y que difícil es tenerte. Me parece oír tu risa desplegada por los pliegues de mi falda, entre las cornisas de mi alma y tus dedos rozando mis labios_ Que aún no hiciste _ pero los siento.

No sé si te seguiré esperando como alma que navega sin rumbo por los escabrosos límites de un cuerpo. Pero miraré al hondo clamor de tus entrañas donde muero y renuncio a vivir para siempre.


sábado, 15 de marzo de 2008

Todo y Nada

Venimos sin traer nada, ni siquiera la voluntad de haber elegido venir y nos vamos de igual manera, sin nada y sin elegir la marcha.

No es nada nuestro, somos inquilinos que cruzan deprisa el cauce de la esperanza, dueños de nada, ni un solo momento de la gracia, con las manos vacías cruzando auroras y atardeceres, bien pareciera que no se encuentra aquí nuestra casa.

Quien sabe donde lo tuyo, lo mío, lo nuestro aguarda., no somos dueños de lo que nos acompaña, lunas, mares, astros fuego, aguas…

¿Tendremos eso en ese lugar al que nos mandan para poder rescatarlas?

¿Quién nos engaña?

Todo es prestado, temporal hasta lo que nos regalan, la ilusión de levantarnos cada mañana, la inacabable respuesta, el sí y el no de las madrugadas de todos esos días que nos libramos de las amarras, de la luz y la oscuridad del alma, de nadie la boqueada azul del cielo y el agua, las miradas tranquilas del árbol donde tatuamos el primer nombre del amor, el silencio y la boca desmesurada de las palabras, no es nada nuestro y sin embargo, todo nos ata, cuando lloramos por pérdidas y por faltas y aún así recibimos el sol cada mañana como si la luz fuera tan nuestra cuando nos acompaña en las entrañas.

Decimos mío, tuyo, nuestro… las hojas crecen bajo nuestra mirada, y sabemos que no estaremos para contarlas, la vida se hace promesa para cortarlas.

Canta el alma en las brisas de las eras, nosotros hoy, mañana serán otros los que lo hagan, otros que vengan y digan, mi mundo, mi cielo, mi tierra, mi casa… las mismas cosas, los mismos miedos, las misma esperanzas y grabadas en el tiempo las mismas palabras, ¡qué de secretos, cuantas cosas desperdigadas¡ ¿o están ordenadas como si de un ciclo se tratara?

Todo lo que se rompe y se pierde, y esa esperanza que vino para guardarla y que pensamos que siempre nos acompaña, y que me olvidé de su sitio y de su nombre ya para no volver a buscarla.

Nos llenamos de sombras espesas y de huecos enormes con ecos y huellas que dejaron los vivos y los muertos, los poemas perdidos, lo que apenas dijimos en una vida echada de bruces en la nada, como un beso perdido que visto del revés, sea una lágrima. Nos lo dan todo y nos dieron nada.

Con el Adiós Atado...

Poema dedicado a una persona que está sufriendo un desamor, va por ti Julia.


Me has abrazado,

Con el adiós atado,

Como las hojas muertas

En noviembre

Se abrazan al suelo,

Con ese abrazo desenamorado

Del para siempre.

Y no fue un abrazo, ni una caricia,

Fueron hojas sobre mi espalda

Cayendo, , muertas, silentes,

Y lloré…

Como el árbol llora,

Cuando caen sus hojas.

Solo Quiero

Soy como aquella rosa

Que lleva el corazón volado

Cuando el viento lejano

Solo viene y de caricias

La roza…

No quiero ser rosa

Ni el viento mi amado,

Solo quiero tiempo de tu tiempo

Tu aliento

Y tus manos.

Volverán...

Se cayó la luna de amores

se volvió lisa, fría como losa

se quedó un suspiro

vagando

en los vértices de tu boca,

como un aroma de besos que duermen

como cuando el alma se queda sola

y enmudeció tu mirada,

en los surcos de otra boca

como enmudecen las manos

cuando otras manos la rozan,

y volverán a ser sones

como notas de otras notas,

que antes tocaban la música

de aquellos dos corazones.

jueves, 13 de marzo de 2008

Me DesarmasTe.

Te fuiste colando en mi interior

como una estación en la tierra,

alimentaste los surcos de mi sensibilidad

tallándote en la piel de mi horizonte,

ausente, te invoco

con el latir de mi espíritu deshojado,

con mi abierto de manos,

con mis brazos blancos,

desnudos, suaves, al compás de tus ojos.

Me arañas el alma,

la garganta,

las ganas,

levantas mi piel,

me tiñes los labios con las yemas

de tus dedos descarnados

que hundes en mi carne.

Te siento en mis pupilas,

en los latidos de mis venas,

turgentes y rojas que erosionan tu sangre,

y yacen junto a las ramas de mi corazón empapado…

asaltas mi cuerpo y cuando cierro los ojos,

me muero de miedo.

Y es cuando sé,

Que no podré acallar la manada de lobos

aullando dentro de mi alma,

intento arrancarme a jirones

todo el sentimiento acumulado,

intento desgarrar la carne jugosa del amor,

y destrozar los pezones del placer…

ahogar la más pura esencia

de una mujer enamorada,

queriendo así amurallar

la fortaleza infranqueable de mi pecho…

En mis aullidos imploro,

Un corazón más fuerte

Para volver a nacer.

Me desarmaste.

Me siento como fiera enjaulada

Arañando las paredes de la calma.

Nunca Te Sabré.

Me asomo cada noche

a lo ya extraño de tu presencia,

se hacen extraños los no próximos

la ausencia aleja de voz y tacto,

siento como una indescifrable y cálida brisa

llena de enigmas…

Nunca te sabré…

emerges de mi boca

como la sangre dulce, fresca e invisible

que preña las imágenes

imposibles de mi sueño,

susurras en mi oído espermáticas silabas

saciándome de la niebla de tu saliva,

impregnando la laguna de mi persona…

y a pesar de eso y a pesar de todo,

nunca te sabré…

por mucho que te adentre y te cubra

con mis besos de ayuno,

sanadores de la noche que te auguro.

Su Nombre... Mi Nombre...

A veces me da por pasearme por las calles, sola, observándolo todo y a todos cuantos pasan, caminar, caminar con una misma es una de las costumbres de nuestros ancestros que aún nos queda al ser humano.

En mi paseo he tenido un encuentro, me ha parecido que algo o alguien se me cruzaba repetidamente por delante, pareciera que no vale mucho su tiempo, apenas casi nada, va gastado de sueños, deambula por la plaza, por la tarde, en la mañana, supongo que en cualquier estación, verano, invierno, otoño…

Se para, me mira, rebusca en sus bolsillos (laberinto de añoranza) se apoya en la esquina ( su felicidad de ayer), sonríe, se dobla en cuatro partes, camina cabizbajo sobre las cuatro mitades de su soledad reciente, busca un destino, un recipiente donde derramarse.

Se detiene en los ojos de la gente, de la tristeza a la alegría, del vacío a la plenitud que cabe en un encuentro, busca un pecho donde alojar su sentimiento, lleva en la frente un trajín de cambios, de holas y de adioses… parece que sale de mundos paralelos de rutina, de silencio involuntario, de reclusión en la cárcel de si mismo.

Mira a todos cuantos pasan, él se queda, me mira, tras su mirada se esconde el mundo inmediato, en estos momentos yo soy su objetivo, estoy ya en su mundo inmediato sin saberlo, en el latir de sus horas.

Yo soy la meta que marca su espera, el instante en cada segundo de su tiempo…

Intenta darme la mitad de su sombra, la mitad de una vida, la mitad de su espacio, la mitad de su caminar hacia partes que aún no sabe, y recorremos calles impensables… descubriéndonos…

Ya sé quién es, no me lo dice, pero se deja ver, se llama Amor…

Y yo quiero llamarme Libertad.

Muros.

Se coló por mi vientre

un viento afilado

y quebró el junco,

tu última no caricia

me arrastró serenamente

y te apartó de mis orillas,

puede ver como los ríos

se juntaban

en el cauce estancado

de nuestros cuerpos lejanos,

en el pentagrama de la noche,

arpegios de luna asomaban

mientras el corazón,

se silencia

y en un grito mudo

pronuncia:

Tengo muros por entrañas.

miércoles, 12 de marzo de 2008

Ni de Noche Ni de Día...


Puentes de aguas

mis ojos…

por donde fluyen los ríos,

que anegan el corazón mío,

manojitos de claveles

son estos labios de brío

que palidecen su rojo

cuando te nombro,

el aire se hace de nubes,

se encierra en mi blanco cuerpo

atrapando mi memoria,

cuando brota tu recuerdo,

y se arrastra por mi sueño

desbocándome el anhelo,

y luego…

versos, versos, versos

siempre y solo versos

¡Ay amor que poco tengo!

eres la tenue brisa

que empuja el viento…

las estrellas, su universo, el aire, el mundo

la frente, el regazo, la ausencia, la espera

el hastío… ¡ Que desvarío!

para qué tanto sentir

si no eres mío,

ni soy de ti

si el día no llega

y eres solo noche febril…

si me duermo estoy allí

si tú te duermes, estás aquí

ni siquiera un eclipse de luna

nos hará coincidir.

Todo muere con mi sol

y todo nace con mi noche

¿quién lo ve? ni tú ni yo,

ni nadie, nadie.

Qué nombre le ponemos

A esto que no se nota,

Cauce de sol oculto

O madrugada remota.

Palabras de Amor... Palabras.

Hoy voy a beberme todos los instantes

Hasta quedar ebria de tu ausencia,

Que la noche entera pase

Y tome en silencio mi cuerpo…

Luego, que la eternidad se rompa

Y a un tiempo,

Mi corazón rompa gallardo

Tu recuerdo,

Que florezcan los cerezos

Clavándose en mi pecho,

Que te saquen de mi sueño

En un momento, ahora…

Que tu nombre lo expulsen mis labios

Como la espuma de todas las auroras

Dejando mi beso suspendido de universo,

Sonará la voz rota del cielo

Mientras te cubro de olvido y

A miles de kilómetros visto de harapos

tu recuerdo…

bien lo mereces, aunque mi corazón

desangre como fuente,

me miras y en tus ojos,

negro solemne

y yo de esperanza,

me llevo el verde…

tú dices que me quieres

y yo, que mientes,

imagino la noche de tus palabras,

buscando un nuevo puerto

donde mecerse,

eres de cualquier fuente

que mana…

si te entretiene,

entre tus versos de piedra,

y sobre tus noches de magia,

pasas llevando en tus labios

palabras de amor…

palabras.

martes, 11 de marzo de 2008

Mujer.


Marí Curí la primera mujer que ganó un Nóbel, la primera que se licenció en la Soborna y la primera que ocupó una cátedra en la misma y la única que alcanzó un segundo Nóbel.

Suficientes motivos sin precedentes, pero no los suficientes para evitar que fuera su marido el que tuviera que recoger el premio y pronunciar el discurso a su hazaña, mientras a ella la obligaron a sentarse entre el público sin más derecho que ser observadora de sus logros.

¿No es cuánto menos increíble, intolerante e inadmisible?

Con un poco de atraso por el día de la mujer, pongo este escrito dedicado a ella y con él dejo un buen referente y un ¡Menos Mal! Que la represión femenina en todas sus formas, casi, casi ha llegado a su fin, y digo casi porque aún algunas mentes masculinas no se quieren dar por enteradas de que la mente no en todo y para todo tiene sexo y que cualquier mente que tenga sus cualidades personales, sea masculina o femenina puede llegar al mismo sitio y sin duda tiene los mismos derechos al reconocimiento de esos méritos, incluso pueden estar hasta más capacitadas.

No necesito poner más ejemplos que el de Marí, que por supuesto los hay, solo añadir que a la tortilla del mundo se le puede dar la vuelta juntos y no en solitario.

Enhorabuena por los logros femeninos que tanto nos ha costado su reconocimiento y su oportunidad.

Mujer tú que estás colmada de paciencia, que tan lentamente has demostrado, ¡Sigue demostrando!, no ya por tu orgullo propio como persona y como fémina sino por hacer del mundo un lugar justo donde no se marquen las diferencias de ninguna clase a favor de la convivencia y el beneficio para todos.

Aunque a nosotras no nos ha hecho nunca falta que nos dijera nadie de lo que somos capaces, hemos creído siempre en todas las épocas en nosotras, a pesar del duro paseo por la historia, esa hecha por el hombre y para el hombre durante siglos desde que el mundo es mundo, no sabemos ciertamente los motivos, aparentemente, creemos que el machismo (estado egocéntrico, dominador y temeroso de la mente masculina) estado que nos arrinconó tanto tiempo en la trastienda.

Mi homenaje a la mujer, a mi misma, como persona, como mujer, como madre, como sombra, como apoyo y como capacitada trabajadora.

A ti mujer, que eres la sal de la tierra, la gota de vida que colma… sin que se te reconozca, para que sigas caminando con fuerza en el paso venidero del mundo, para que los hombres lo acepten de una vez por todas, en todos los rincones del planeta.

jueves, 6 de marzo de 2008

Mírame.

Clávame tu mirada

con tus pupilas de infierno,

que se claven hondas

en mi pecho

y me desangre en tus manos,

que hierva roja mi sangre

en la comisura de tus labios

que nuestros sentidos se mezclen,

flumígeros…

clávame tu mirada

y que muera Dios

al hacerlo

que lo haremos renacer de nuevo,

más inmenso.

S/T

A esta sirena varada,

Háblale de amor Marinero…

Que sin amor no brilla el sexo

Y con amor,

Arden luceros.

Erótico Poeta.

Cuando escribes al deseo

transparentas tu semen

a golpe de bolígrafo,

la tinta se torna blanca

en cada trazo…

y el papel con el que juegas

vuela a ser trampolín

de la conquista,

¿juegas a alquimista del sexo?

Es hermoso crear oro

cuando suspiras y respiras

y te tragas boca adentro,

las letras de su nombre,

revientas la pasión

en cada frase

dibujan las letras

la sonrisa ávida

de tu retina,

como fugaces caricias visuales

lanzadas con mortero

que derriten de las pupilas

el acero…

¡es tan cómplice el deseo!

miércoles, 5 de marzo de 2008

S/T


Cuando el sol entra por mi ventana apenas nace el alba, sé que estás conmigo, porque formas parte de mi luz, hueles a sol, a madera, a polvo de estrellas a ternura inmensa.

Me besas con tu boca poderosa y en tu mirada me posas, formas parte de mi vida y aún no te viví, pero te agarras a lo poco que me alcanzas.

Unos pocos poemas, un teléfono, y nuestras palabras, sé que existes pero no sé si es solo mi deseo el que hace que mi boca al nombrarte se haga agua y calme un tanto mi sed de ti que me apelmaza.

Caminé por los imposibles de no estar contigo, pasear por las ciudades de la mano, y señores del amor en los hoteles ser llamados, contemplar el mar, ese mismo mar que contempla mi nostalgia cuando me quedo sentada mirando su infinito…

A veces con sol y otras cuando la luna refleja el llanto de un marinero por su amada sirena.

Sobre mi rostro el pelo alborotado suple a las manos que no pueden abarcarlo y de mi boca entreabierta salen los besos que nunca te he dado…

Mi mirada anda por tu ausencia, se hace eco de tu presencia y envuelve mi alma mullida, traspasable y solitaria.

Huye la luna y regresa eterna dejando su mensaje en un reflejo, mientras te pienso.

martes, 4 de marzo de 2008

LLuvia de Estrellas.


A veces lo que se vive, son los argumentos de historias que mejor se pueden escribir, para dejar constancia de los momentos mágicos que ocurren en el día a día de la vida, son esas pequeñas cosas que la montan, que pertenecen a la rutina de los hechos que ocurren en el transcurrir del tiempo, pero que se diferencian por la carga de emoción y magia con que las vives.

Hace unos días mi hermana, y yo de noche en el salón con las cristaleras de la terraza abiertas que al estar alta se ve mejor el cielo, de repente vimos un bellísimo espectáculo.

-¡Ven a la terraza¡ ¡corre!, llueven estrellas.

Besan el aire de Marzo acristalado y mueren inflamadas al fondo del espacio, dame esa silla, date prisa, que se moje húmeda de luna, se ha vuelto loco el cosmos y se ha embriagado el crepúsculo…

Ahí llega al fondo la luna, viene de nebulosas jaspeadas, parece borrar su imagen de la bóveda en la alborada.

Cómo quisiera ser uno de esos puntos de luz y llover errante y libre por el Universo, jugar a los bolos con los engendros ópticos y magnéticos y meterme en las esferas de torrentes de luz que escapan a mi juicio.

Mira, es noche de artificios, en el cielo están de fiesta, Urano baila sobre los negros de la noche y cabalga a lomos de sus impulsos beodos.

Esta noche es la de escribir versos, las estrellas están revolucionadas, dan golpes de luz, son kamikaces nocturnos que se lanzan al tiempo y al espacio, observadoras eternas de una lamentable historia de la humanidad, es un espectáculo mágico, quizá estén protestando en pos de la paz y el silencio, del entendimiento, críticas profetas del gran orden, ancladas en la triste vista de una rebeldía muerta contra el dolor, el sufrimiento, la carrera nuclear, la guerra…

Quizá sea un momento de la sensibilidad del cosmos, de el pasar de las almas ya anónimas capaces de enfrentar sin miedo a los fantasmas del progreso y de la imaginación, del crecimiento desmesurado como serpiente de brea que devora y asimila ideales y triunfos de falsos redentores.

O el momento de los que cuelgan en la bóveda el íntimo recuerdo de algún amor desahuciado, o de abrir la puerta a las caricias, a la ternura de quienes aman en la distancia.

O es el momento de la revelación del Cosmos ante ese otro momento de las nuevas convenciones de pactos fríos con la guerra para que la sangre no corra ni los ríos de esperanza se detengan…

Cuanto se puede ver en una lluvia de estrellas….

sábado, 1 de marzo de 2008

Ser un Poema

Quiero ser un poema

que rompa las profundidades,

y se extienda sobre la tormenta

de norte a sur, sobre los verdes

y al este y al oeste que me sostiene,

sobre el océano de los atardeceres,

volverme aire

y ser ese aliento impronunciable

que me late si me apoyo

en esta hoja en blanco

que es mi grito en el silencio,

corriente subterránea

donde anida el pensamiento,

como un río de palabras con abismos,

unas manos, unos ojos que se abren…

laberinto sobre olas,

besos, por si eres alma y yo tu mundo,

que cabe en tu puño,

pero aquí solo está mi mano

y una hoja en blanco,

dentro, el adormecer de unos labios,

eco impenetrable, sueño y caricia,

hasta la exactitud de tu rostro,

trazo en el que desaparezco,

porque en tu pecho me envuelvo,

porque soy poema al aire y en ti me quedo.

Versando amor, versando
Poema tras poema,
tus labios, mis besos
cómplices temerarios,
sabe la inspiración que nos alumbra
dónde encontrarnos...
Tu corazón, el mío, nuestros días,
mi hora sobre tu hora,
Tantas formas de querernos
En una sola.