Sueño y Vuelo, aunque me caiga luego...

Sueño y Vuelo, aunque me caiga luego...

Corramos... Hay que salvar el planeta.

Corramos... Hay que salvar el planeta.

La Tierra

La Tierra
.

sábado, 31 de enero de 2009

No permitas que llore.


Amor mío
El viento que baja desde los montes
Agitando flores y ramas
Me trae un rumor extraño de hojas
Ladrar de perros, voces lejanas.

Respiro hondo…

Pasan rostros, miradas, voces y
Manos que me saludan…
Desde el principio hasta el fin
En todo busco algo tuyo
Pero nada se parece a ti.

Porque tú fuiste un árbol
Grande y hermoso
Cuyas raíces…
Sembraste en mi cuerpo
Y en mi corazón
Enredando en él mí alegre
Juventud de pájaro cantor.

Como me duelen mis días
Y mis noches tan solas y frías
Me duelen tus manos
Llenas de mi cuerpo
Pero me duelen con alegría.

Porque tú me amaste
En el lecho de jara y romero
De amapolas de sangre
Y de margaritas blancas y
Amarillitas.

Cuántos atardeceres rosados
Cuándo el sol agonizaba
Detrás de los montes
Tú y yo…abrazados…

Sumergidos en un mundo raro
Veíamos el ir y venir
De las mariposas de nácar
Y las libélulas de alas de oro.

Saltaban los peces de plata
En el agua cristalina
Y todo el lago…
Se llenaba de mis risas.
No permitas que llore…
Sola e indefensa en mis faldas
Que temo que la dura noche
Siga siendo tan larga.

Ya no me gustan las motos...


No te preocupes por mí, hoy estoy triste, nunca me viste verdad?
Así… tan triste.
Pero ya me conoces el rostro, a veces lo llevo oculto, sin querer cubre mi cara, pero volverá pronto la sonrisa.
Basta que oiga un poema, un cantar o tu palabra.
Me has descubierto a solas con la pena, preguntas el porqué ¡si no hay motivo!
¿Qué no hay motivo?...¡ pero si no estoy contigo!
Cuando menos se espera, el aguacero cae sobre la piel de algunos ratos. Suele pasar. No te aflijas. Desde allí donde te encuentres sabes que no habrá nada ya que nos separe.
Es solo un aire, un olor que ya llevo suave ¡ha pasado tanto tiempo!
Si ya sé que éramos unos niños, y que tú allí en ese punto te quedaste, pero vienes de vez en cuando con tu soplo eterno a acariciarme.
Y me dejas un momento entretenida en escuchar los pasos del silencio aquí a mi vera, y despierto cuando siento la misma tristeza que esa mía, de otros muchos que no tienen amor ni compañía.
Es cuando empieza lentamente a remitir esta agonía.
Y me dejas en mi alma algo que no pasa inadvertido, algo que me transita y que no veo, dejándome el universo prodigioso y convertido que casi vuela al explicarlo, como si alzaras tu peso que ya ni pesa siquiera y me aplastaras el pecho.
Acaba ya este pequeño momento de tristeza. ¡Que grande es por dentro!, escribo mi poesía diaria que contagia mis manos y me llena la tarea de un poco de gracia, con esa que huelen las mañanas con que saben las cosas escondidas y enamoradas, y cruzo el umbral del mundo de los vivos, allí me esperan sensaciones y vida… ya, otros motivos.
Aunque siga con esa constancia de tejer ese hilo de cielo que no se pierde en la distancia para de vez en cuando no tener motivo y ¡Tenerte conmigo! Sintiendo que me miras y que en la muerte de cada segundo encuentras la vida.

viernes, 30 de enero de 2009

Querido Desconocido.

Amor yo no entiendo de medias ni dobles tintas, ni raciones…
porque lo absurdo y lo inexplicable no tienen medida y en la sin medida se fragua la pasión, esa que ciega o alumbra el misterio del amor…
Amor es uno y es todo, no entiende de división ni se reparte en trozos… tuyo y todo, tómalo o déjalo, sin repartos ni porción…

No te calles… Habla…

Si callas me distraes, porque tu silencio me absorbe más que el mío…
penetra mi levedad y me dejo llevar por la incoherencia del amor, que agita mi calma
y serena mi delirio…

El amor todo lo ensancha y todo lo reduce…

o se desboca o se consume…

Amor ya sabes… “el amor es quien te dice”.