Él llega con el aliento quebrado anunciando su llegada, sus labios expresan la impaciencia de palabras esperando, le tiemblan las manos como si fueran pájaros…
Un estremecimiento sutil, se mece entre sus brazos como quien aguarda un abrazo y su sonrisa, es un tic vencido por la impaciencia y la prisa… la está esperando.
Ella esparce su aroma por el aire, camina sin saber que un cuerpo revestido de una calma que no es cierta, la aguarda.
Él se clava las uñas en el corazón cada vez que sale el sol, esperando el momento anhelado que ella pasa por su lado para con sus ojos, derramarle el amor, con una mirada convertida en lebrel que salta las matas tras la presa, con afán e impaciencia…
Por fin la ve al fondo de la calle arrastrando el sol con sus pasos, las miradas se encuentran… él sueña que hoy podrá acercarse a ella y decirle lo que nunca le dice… Ella, piensa en la forma con que le dirá a ese bello corazón, que no lo ama, que el amor es una ola que si llega arrasa y que llega sola, sin fórmula ni ecuación…
Una gota y otra gota hacen mares, es fusión, es una unión, y él anda solo en su pasión…
No se puede doblegar al corazón, todo viene de dentro y si no, te llega grande sin encontrar su sitio, como una estrella errante, que fugaz, no respira el mismo aire que respira esos labios de cupido…
Ella pasa sin advertir que él lleva grabado su nombre en esas manos que deshojan las ganas de deshojarse… aspira el aroma frágil de su pelo que cabalga risueño por el viento, se deshacen sus manos en sudores de rocío, respira su nombre hasta saciarse, hasta que de ella se le haga el aire, sustento de sus pulmones…
Pasa el momento que dicen que es el paso de un ángel, el encanto se rompe, ella se viste de huida y a él se le ha caído al suelo la espera, llenándolo de diversidad y de contrastes, ella desaparece calle abajo y él extravía la mirada cuando pierde su paisaje mientras fabrica fantasmas y el silencio pasa...
Hola queridísima amiga!!!!
ResponderEliminarMil gracias por tus bellas palabras en mi blog y por tu precioso cariño..
Me ha encantado leerte hoy!!! Me han estremecido estas palabras... qué retrato tan bello de un des-encuentro...
UN ABRAZO INMENSO!!!!
El amor requiere estar más atentos,
ResponderEliminarel amor no puede estar distraido,
quizas no era amor tu relato exraordinario.
Me ha gustado mucho, como casi siempre mi niña.
Mil besos
Preciosa narración, me encantas, no me dejes solo ninguna mañana.
ResponderEliminarMil besos
Tengo un regalo para ti, dime como te lo hago llegar
ResponderEliminarMil besos
Mi niña hoy has traido un texto delicado lleno de amor, que lo derrama como esos ojos.
ResponderEliminarNo sé, me encanta como escribes.
Un besazoooo y espero que el finde esté yendo de maravilla.
Gracias a todos, sois un gran apoyo y os quiero.
ResponderEliminarBesitos de esta tonta sensiblona.
precioso relato , al igual que los demas , te felicito ,por tu forma de escribir , un besazo enorme
ResponderEliminarUn poco triste este realto de desencuentros, aunque tal vez sea yo que estoy atrapado en el tópico de que los finales deben de ser felices.
ResponderEliminarSi yo fuera capaz de idear una historia así (que va a ser que no...) le pondría un final un poco más dulce. Será porque me dá por creer que, aunque dos caminos no se encuentren, siempre existe la posibilidad de dar una oportunidad a la sonrisa amable y sincera. Una sonrisa y un pequeño e inocente guiño, si se tercia...
Una gozada leerte, querida amiga (y gracias por tus desmesurados comentarios).
Gracias Suri.
ResponderEliminarY no creo que mis comentarios sean desmesurados, no mereces menos, pero si es así, entonces somos unos desmesurados no? :) Un abrazo.