Vamos a brindar
por el fin de los poderosos
esos necios...
Adictos al disfraz
que oculta el rostro y el gesto
y que en el fondo de la copa
con suave susurro gaseoso,
apuremos (ahora es el tiempo)
el sabor y la visión de los locos cuerdos.
Acabando con los triunfos
de los falsos redentores
que no tienen principios ni ideales
Los TAHURES BIENPENSANTES.
Brindo Sí ya que soy un loco cuerdo. Un placer tu brindi y tu blog.
ResponderEliminarAntonio. El loco cuerdo.