Sueño y Vuelo, aunque me caiga luego...

Sueño y Vuelo, aunque me caiga luego...

Corramos... Hay que salvar el planeta.

Corramos... Hay que salvar el planeta.

La Tierra

La Tierra
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jueves, 31 de enero de 2008

Porque somos.

Porque fuimos

porque eres

porque soy,

en una gota del tiempo

que descansa en los sueños,

porque somos beso

antes que labio,

porque somos

sed antes que agua,

vuelo antes que alas,

mirada antes que palabra,

aura antes que cuerpo

porque somos eternos

infinitos sin tiempos,

pasos sin pisadas,

porque somos todo

desde fuera hacia dentro,

algo inevitable

como la mano acariciada

por el aire.

La mano, la palabra.

Hola,

Te presento una parte de mi mundo,

esta palabra, otra,

esta mano que extiendo, la otra,

mi deseo de extenderlas

de apretarlas,

dejar que hablen

que te lleven algo

en un segundo,

como una entrega

de sentimientos desnudos,

el deseo abundante

de decir lo que pasa

y lo que nunca pasa

de navegar por el alma

ese paisaje azul

o de tocar la nada

gritando al universo

de latir desde los huesos,

te muestro mis sueños

desde el comienzo,

porque el fin no lo encuentro,

te presento mi pequeño mundo

ese en el que tanto me equivoco,

pero no importa,

aquí también va mi mano

y si quieres, la otra

y las palabras de mi boca.

tocadla, absorberlas cuestionarlas,

no las dejes vacías de estancias,

que sean mares, olas, murallas,

quien sabe hasta donde puede llegar

la magia en forma de mano, de paisajes,

de palabras… sobre azules de cielos

y mares de agua.

martes, 29 de enero de 2008

En Tu Corazón.

En tu corazón,

guardaré la insignia

que me nombra,

porque la vida es todo

cuanto abarca tu calor,

y allí en tu mirada

y en tus gestos,

me arrojaré llevándome

el misterio con que nutro

mi verdad,

no en tu alma

ni en tus pupilas

ni entre tus manos,

desde tu pecho,

es más allá

donde el gozo acude

y se une,

desde el sueño

haré caminos

en los caminos que hayas cruzado,

y andando por tu ausencia

me envolveré de tu presencia

mullida y traspasable,

y respiraré tu nombre

hasta saciarme,

aunque seamos tan inmateriales,

que solo vivamos entre dos instantes.